Y pasamos las primera hoja del calendario de este 2010, cada día pasa más rapido, pero este se vive, este febrero esta siendo como los de antes, de palabras dulces y sonrisas constantes, de nublados y soles pero mas soles que nubes.
Desde hacía tiempo tenía ganas de hacer un pastel, algo dulce, y hoy era la escusa perfecta para no demorarlo más, me he levantado y el sol brillaba especialmente bonito en los edificios de enfrente, el cielo sin una nube hasta parecía que la primavera quería arrebatarle días al invierno, unas compras y todo listo en la cocina al son de una música melodiosa para hacer ,con el máximo mimo, la tarta para mi hermana, un cumpleaños no es un cumpleaños sin una tarta alrededor de la que desear buenos deseos.
Mi deseo lo dejo guardado entre gominolas y siropes, para que se conserve dulce, al menos, hasta el año que viene.
Desde hacía tiempo tenía ganas de hacer un pastel, algo dulce, y hoy era la escusa perfecta para no demorarlo más, me he levantado y el sol brillaba especialmente bonito en los edificios de enfrente, el cielo sin una nube hasta parecía que la primavera quería arrebatarle días al invierno, unas compras y todo listo en la cocina al son de una música melodiosa para hacer ,con el máximo mimo, la tarta para mi hermana, un cumpleaños no es un cumpleaños sin una tarta alrededor de la que desear buenos deseos.
Mi deseo lo dejo guardado entre gominolas y siropes, para que se conserve dulce, al menos, hasta el año que viene.
Beatriz M.
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